viernes, 9 de julio de 2010

Fundación de la Hacienda



La hacienda fue fundada por los Padres Carmelitas y vendida hacia 1830 a Don Gregorio de Mier y Terán; se localizaba en la margen oriental del río Lerma, al norte de la ciudad del mismo nombre; llegó a tener una superficie de 126 caballerías (unas 5, 418 has.) y se dedicaba al cultivo del maíz, cebada y haba; además de la ganadería, con 1, 400 cabezas de bovino, 1, 170 de ovino y 600 de porcino, hacia 1889-93 (Romero, 1979b: 135).

Permítaseme, por unas líneas, abusar de las citas: Dice Mariano Riva Palacio: "Una vez establecidos los padres carmelitas en la hacienda..., emprendieron diversas obras con el fin de mejorar sus fincas. Reformaron, o más bien, construyeron la calzada de Amomolulco á Lerma por el lado Sur, y por el Norte levantaron diversos bordos elevados, con el fin de aislar sus tierras de las aguas. Al mismo tiempo encajonaron las del rio de Santa Catarina, variando su curso repetidas veces" (Riva Palacio,1871).



Y Madame Calderón de la Barca la describe hacia 1839-42: el "dueño es el Señor Mier y Terán, fue lo único digno de mención que se ofreció a nuestros ojos antes de que llegáramos a Toluca. Esta hacienda, propiedad antaño de los frailes carmelitas, es una finca muy valiosa. No se ve un solo árbol en sus terrenos, ni tampoco en todo el valle, que en gran parte se encuentra dentro de los linderos de la heredad, pero en cambio abundan en ella los grandes campos de maguey y de maíz; y un hermoso río pasa a través de esta hacienda, una de las más productivas de la República. Los jornaleros son, en general, indios otomíes, una pobre y degradada tribu..." (Calderón, 1967: 346). Además, a la hacienda San Nicolás pertenecían dos haciendas más: Santa Catarina (Romero, 1979b: 135) y Cocoapa (Ibid: 137). Hacia 1912 su propietario era Ygnacio de la Torre y Mier, y contaba con 150 trabajadores (Ibid: 233-237).

Es posible que las citas sean excesivamente extensas, sin embargo describen bastante bien a la hacienda. Conviene, en todo caso, poner de relieve algunas características. La primera se refiere a sus actividades productivas, donde la cantidad de ganado seguramente implicaba el uso de forraje producido en la laguna; por otra parte (y es de lo más significativo), los frailes trajeron un método de trabajo hidráulico, pues sabían cómo manejar el recurso, cómo aprovecharlo. El caso del río Santa Catarina y los diques en torno a la ciénaga son por demás ilustrativos de la relación que establecieron los frailes con el medio acuático; ellos, a su manera, construyeron y reconstruyeron los límites físicos superficiales de ambos cuerpos de agua. 

La venta de la hacienda a principios del siglo XIX, probablemente no modificó sustancialmente la relación entre la infraestructura hidráulica construida y su uso. Es posible que cuando Riva Palacio expuso el proyecto de desecación a los hacendados, el apoyo del entonces propietario de San Nicolás debió ser muy significativo en términos de convencimiento para los demás propietarios. Finalmente, el paisaje toluqueño descrito por Madame Calderón de la Barca coincide bastante con aquélla descripción de Humboldt referida en el Capítulo I acerca de la aridez y la semejanza del paisaje mejicano con el paisaje de Castilla.

3 comentarios:

  1. Gracias por el esfuerzo de publicar el blog de un pueblo con historia.

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  2. Yo soy originario de aquí y es un orgullo saber su historia

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  3. Soy de Xonacatlan, es agradable escuchar esta historia, o más bien, parte de ella.
    Saludos.

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